El lenguaje arquitectónico no solo se limita a la forma de pensar de un grupo de arquitectos que forman parte de un taller o despacho, sino que poco a poco se mezcla con las cosas y/o actividades cotidianas.
De las simples pláticas, pasando con los debates y llegando a la crítica "constructiva" de la forma de pensar del quehacer arquítectónico de firmas como TEN Arquitectos o TAX, llegó a una conclusión deportiva y a un encuentro de futbol (7). Más allá de hablar de contrincantes, la Arquitectura dominó a cualquier otro impulso o pasión, pasando de una simple competencia a un convivio (bar conde) trascendental.
El diálogo deportivo fusionado con la pasión arquitectónica debe ser un buen punto de partida para re-visualizar los alcances del Oficio de Arquitecto, el cual debe situarse también como un usuario, entender su entorno y proponer mas formas de interactuar con sus iguales o contener a cualquier tipo de mentalidad o actividad.
¿Qúé otras actividades se pueden analizar con la arquitectura? Porque al final es una buena forma de vivir la arquitectura.
