miércoles, 11 de febrero de 2009

architecture must burn [wolf prix]?

La contundencia de esta frase en un contexto motivacional hace que la pasión por la arquitectura fluya candente por todo el cuerpo y tomar un lapiz y trazar cualquier garabato que nazca de la creatividad sea motivo de gozo.

Pero puesto en un contexto de analogía con la serie de eventos que relacionan obras de arquitectos reconocidos con fuego se vuelve ya noticia cotidiana por decirlo de una manera coloquial.

A nivel de tipologías y escalas arquitectónicas los tres ejemplos para este comentario van empezando con el nivel residencial con la Villa NM de UN Studio de Ben Van Berkel que en febrero del 2008, después la Biblioteca de Arquitectura de la Universidad Delph en mayo del 2008 cuyo valor radicaba mas en lo que ahi se guardaba ( documentos y sillería original) y recientemente el edificio parte del conjunto CCTV en Shangai, China diseñado por OMA.

Mas allá del hecho, queda al descubierto la fragilidad que la arquitectura de nuestro tiempo está mostrando, que ha superado enormemente el nombre del autor a las regulaciones, previsiones y normas de seguridad.

Es tiempo de volver a "HACER ARQUITECTURA" y no solo obras de revista y nombres en tabloides que resultan en divas arquitectónicas.